Pensionissste –el fondo
de pensiones de los trabajadores federales– tiene una comisión
ejecutiva que decide el manejo de los recursos, excepto, dice el
estatuto orgánico del Issste: aquellas que por su importancia ameriten acuerdo de la junta directiva del instituto
.
La junta la componen los titulares de varias secretarías de Estado.
¿Quiénes formaban este organismo cuando se tomó el acuerdo de invertir
400 millones de pesos –de las pensiones de los trabajadores– en acciones
de la constructora ICA, no obstante que estaba en crisis financiera?
Eso ocurrió el año 2015, según la investigación de Reuters. La junta la
componían por la Secretaría de Hacienda, Luis Videgaray Caso; por
Sedesol, compartieron el cargo Rosario Robles (hasta agosto de 2015) y
José Antonio Meade (de agosto de 2015 a septiembre de 2016); Alfonso
Navarrete Prida, secretario del Trabajo, y Mercedes Juan López,
Secretaría de Salud. Otros integrantes de la junta fueron los titulares
de Medio Ambiente, Juan José Guerra (de agosto de 2012 a agosto de 2015)
y Rafael Pacchiano (de agosto de 2015 a la fecha). Por la Secretaría de
la Función Pública desfilaron Julián Alfonso Olivas Ugalde (de febrero
de 2012 a febrero de 2015) y Virgilio Andrade Martínez (de febrero de
2015 a julio de 2016). El director del Issste era José Reyes Baeza,
quien recientemente renunció al cargo, tiene boleto (y tendrá fuero)
para ocupar un lugar en la próxima Legislatura como senador del PRI.
Una
operación de 400 millones de pesos no se hace en un día. ¿Unos la
prepararon y otros la ejecutaron? ¿Algunos no estuvieron de acuerdo, o
la aprobación fue unánime? Las preguntas son relevantes porque, de
acuerdo con la investigación de Reuters, la inversión de 400 millones de
pesos del Pensionissste se perdió; ICA cayó en concurso mercantil, su
deuda fue restructurada… y el dinero de los burócratas se esfumó.
Contratos del aeropuerto
Aparentemente el Fovissste y el nuevo Aeropuerto de la
Ciudad de México no tienen conexión. Sin embargo, podría haberla. La
constructora ganó este mes el contrato para construir las plataformas
que forman el proyecto del campo aéreo. Su valor es de
7 mil 145
millones de pesos, sin que se incluyan los impuestos. El proyecto
consiste en realizar las estructuras de concreto, acero y pavimento
donde se resguarden las aeronaves de ascenso y descenso de pasajeros.
Caben dos preguntas: ¿hubiera podido participar ICA en la licitación, de
haber sido descalificada por la Función Pública por el expediente
Fovissste? Ahora que la suerte parece favorecerla, ¿devolvería a los
trabajadores federales los 400 millones de pesos perdidos? Moraleja:
todo contrato, inclusive el del aeropuerto y los petroleros, son
revisables. Incluso contienen cláusulas que dejan la puerta abierta a la
revisión. No son pactos con Dios.
No aparecen los donativos
Las inundaciones, los terremotos, los huracanes suelen
convertirse en botín de los funcionarios (e instituciones privadas) que
manejan los donativos para los damnificados. ¿Recuerdan las juntas
federales de mejoramiento? Las desapareció López Portillo porque era un
escándalo cómo se movía el dinero. Las acusaciones llegaban hasta el
Presidente, que antes de ocupar el cargo las tuvo bajo su
responsabilidad. Sin embargo, no tiene precedentes lo ocurrido con el
#19S. El destino de millones de pesos es incierto. Un análisis realizado
por investigadores del Centro de Investigación y Docencia Económicas
(CIDE) concluye que no hay información que permita hacer una estimación
de lo donado, pero se calcula que son varios miles de millones de pesos.
Tampoco de su destino. El Inai ofreció llevar un tablero de control
. Pero es fecha que no aparecen ni el control ni el tablero.
ofertó apoyos a personas que resultaron damnificadas por los sismos pasados mediante un programa denominado
en la que, previa entrega de documentos (escrituras, dictámenes de
afectación), te autorizaban a retirar dinero de esa subcuenta. En Tuxtla
Gutiérrez fue un calvario poder acceder a las oficinas a entregar
documentos. Muchísimos quedamos fuera, ya que nunca hubo espacio para
que nos atendieran, decían que ya no había fichas. Y aunque en el portal
dicen que el programa durará seis meses, nos dicen que ya no. Quejarse
en las oficinas de México es otro calvario. Ojalá pudieras hacer público este reclamo para