fe de erratas

29 oct 2013

Valdemar Moratto: El AVIÓN DE PEÑA.


   AVIÓN DE PEÑA                                                 

En México; compra de un avión; más caro que el del sultán de Brunei, más caro y lujoso que el de Obama, un portento ingenieril aeronáutico, ¿el costo?: una bagatela; más de 9 mil millones de pesos más 1,147 millones en la compra de seis helicópteros para el traslado de su corte http://eleconomista.com.mx/sociedad/2013/03/10/ademas-avion-estrenara-pena-nieto-seis-helicopteros . 
 TOTAL= 10 mil 147 millones de pesos; (Suficientes para hacer 57 mil viviendas a costo-contratista).

Al “ejecutivo” una escolta del estado mayor presidencial le abrirá paso, al pasar, el cuerpo de virreyes cambiarán su postura y presentarán la frente a su ensalzada figura, las cámaras tomarán el momento histórico, miles de papelillos entreverados con "mentadas de madre" cubrirán el área; el hombrecillo aquel; golpeador y violador en las "escuelotas" por donde “estudió” subirá al avión y se dibujará una sonrisa de “satisfacción” por el gusto que da el placer robado, el interior impregnado de costosos perfumes y exquisitos aromas propios de la “limpieza espiritual” del fulano, la pobreza quedó atrás, los vestigios de la desgracia guerrerense no permanecen en sus zapatos, ¡son nuevos! y los otros nunca se ensuciaron ni con el aire, las tersas alfombras y mullidos sillones le servirán de respaldo para firmar los decretos de ruindad para el país.

Nunca llegará a su mente el hambre y la necesidad de su pueblo, los espejos son grandes, muestran imágenes bellas, dignas de un cuento, de una telenovela de Televisa donde Angélica es la protagonista y Enrique es el príncipe.

Al surcar el aire nítido y limpio de nuestra patria, se observará una mancha; la mancha del hambre de sus compatriotas que les quita todo en aras de “su transporte” todo mundo exterior verá la opulencia de un gobernante representando la miseria de todo un pueblo, pronto esa sonrisa se convierte en mueca al tomar el café  cucarachado, tu mano de poder dará señales al camarero del estado mayor presidencial, su excelsa mente de estadista ordenará aplicar un manotazo en la mesa.

Al bajar del avión se retuerce tu soledad entre los uniformes impecables color verde olivo de los militares (los únicos que lo reciben), todos ellos con miradas de hartazgo por servir a un mequetrefe.

Ing. Valdemar Moratto
@valdemarucho
Tijuana, B.C. México.

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