Además, la Mesa Directiva solicitó que a partir de hoy se realice una nueva auditoría a la Dirección General de Recursos Materiales y Servicios Generales, así como a la Secretaría General de Servicios Administrativos, comandada por Rodolfo Noble, para deslindar responsabilidades sobre las irregularidades detectadas.
Ayer por la mañana, la Mesa Directiva del Senado, presidida por el panista José González Morfin, trató con detalle el caso de Ana Lorena Mendoza Hinojosa, ante el aumento de conflictos generados desde su oficina, que había llevado al Senado a despedir a varios de sus colaboradores, paulatinamente, a lo largo de los últimos tres meses.
Los senadores integrantes de la Mesa Directiva, de acuerdo con la información confirmada por Excélsior, expresaron su preocupación por los problemas generados por el creciente nivel de conflicto que registraba su funcionaria, quien incluso llegó a elaborar panfletos ofensivos contra el secretario general de Servicios Administrativos, a quien acusó de diversas irregularidades.
La ahora funcionaria cesada y sobrina del presidente Felipe Calderón Hinojosa ingresó al Senado en 1998, como auxiliar administrativo, y cuatro años después, en 2002, cuando su tía Luisa María Calderón Hinojosa era senadora de la República, fue nombrada Directora de Adquisiciones, Almacenamiento e Inventarios.
Se mantuvo en esa posición hasta principios de 2007, cuando el entonces presidente del Senado, el panista Santiago Creel, la nombró directora general de Recursos Materiales y Servicios Generales, donde permaneció hasta ayer, cuando fue notificada, por medio de un oficio de la Mesa Directiva, que fue cesada y avisada de que su área será sometida a investigación.
Senadores integrantes de la Mesa Directiva explicaron que durante los años en que Ana Lorena Mendoza Hinojosa fue directora de Adquisiciones, se caracterizó por ser una servidora pública muy responsable y transparente en las decisiones asumidas, comportamiento que mantuvo durante sus primeros años como responsable de Recursos Materiales.
Sin embargo, desde hace unos años comenzó a registrar un cambio radical en su comportamiento, al grado de que en varias ocasiones incurrió en desacato de las órdenes del secretario general Administrativo, Rodolfo Noble, que es su superior jerárquico, e incluso de la propia Mesa Directiva.
Hace unos meses, explicaron los senadores enterados del caso, se le solicitó que hiciera los trámites necesarios para cambiar un elevador que estaba en riesgo de atorarse y generar un problema para la seguridad del personal y visitantes del Senado, pero ella no hizo nada al respecto.
Ante este comportamiento, cada vez más conflictivo, y ante las señales de irregularidades, la Mesa Directiva ordenó hacer varias auditorías a Recursos Materiales, pero además al propio trabajo de Rodolfo Noble, pues ella lo acusó constantemente de malos manejos administrativos.
La situación se volvió insostenible, porque ya afectaba el trabajo mismo del Senado, según relataron senadores integrantes de la Mesa Directiva, y fue necesario tomar una decisión, la cual fue sometida a votación y asumida por todos los integrantes del máximo órgano de gobierno del Senado.
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