fe de erratas

14 mar 2012

Las giras proselitistas de Calderón (y el pago de 38 mil pesos)

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Sección: Conjeturas
 
14 marzo 2012
Muy apurado Felipe Calderón va a las entidades a “inaugurar” obras federales e invita al jerarca mayor del Vaticano, Benedicto XVI, y a la comunidad católica, esperando que el Partido Acción Nacional (PAN) obtenga más votos, que la candidata Josefina Vázquez Mota supere a Enrique Peña Nieto y que el todavía inquilino de Los Pinos (ya debe estar haciendo maletas para irse a una mansión que le consiguieron los estadunidenses en calidad de testigo protegido), no entregue el poder presidencial al Partido Revolucionario Institucional (PRI) que odia, pues juró ante la tumba de su padre Luis Calderón Vega, que a ningún precio le devolvería el cargo. Así que anda de aquí para allá buscando apoyo electoral y manipula con obras para conquistar simpatías.
 
Don Felipe de Jesús estuvo en las vísperas de las elecciones para gobernador en Michoacán, donde los Calderón Hinojosa nacieron de padre y madre panistas, y su hermana María Luisa fue derrotada, según ellos porque hubo mano negra de los narcotraficantes; pero para consolarla su hermanito la puso en la lista de los “pluris”, para que obtenga una curul en el Congreso. Ha regresado a la entidad para entregar lo que el gobierno, cuando menos desde 1940, adeuda a quienes se fueron de “braseros” o “espaldas mojadas” (hoy inmigrantes en calidad de una minoría legal y la mayoría indocumentados) y no recibieron la indemnización estadunidense, ya que el gobierno federal se la embolsó y “jineteó”, no obstante que esos campesinos, de varias entidades, constantemente reclamaban su dinero. No pocos de ellos han muerto en la miseria y sus herederos han solicitado su pago.
 
Como son tiempos electorales, Calderón les entregó una miserable parte: 
38 mil pesos. Desde el entonces presidente Ávila Camacho a la fecha (1946-2012… ¡66 años os contemplan!) les retuvieron esa cantidad que en pesos actuales pudieran ser 1 millón. Pero Calderón también le entró a la estafa. Los campesinos seleccionados aceptaron, a sabiendas de que no era la cantidad debida. Aunque, como en el chiste de cuando el diablo buscaba un alma perdida y no encontraba, al ver una monjita exclamó “algo es algo”. Así los campesinos michoacanos urgidos de dinero lo recibieron. Calderón creyó quedar “bien” y se alejó, al suponer que esos ciudadanos votarán por el PAN y más cuando, algunos de ellos, vean de cerca al pastor alemán Joseph Ratzinger, quien dirá misa en Guanajuato, en el Cerro del Cubilete. Vázquez Mota y Calderón asistirán y comulgarán, al avisar Alejandra Sota (coordinadora de Comunicación Social de la Oficina de la Presidencia de la República) de antemano a los reporteros de la fuente de Los Pinos, para que hagan la crónica y tomen placas del panista purgando sus pecados mientras que en la impunidad están sus delitos por abuso de poder. Y el “no matarás” del decálogo católico le fue perdonado por su confesor, al permanecer vigente el delito que sanciona los homicidios del Código Penal Federal; pero el PAN está sentenciado a perder las elecciones presidenciales por su desprestigio, el mal gobierno de Calderón y porque el Partido de la Revolución Democrática y el PRI (éste con su pasado y aquél con su presente) son las dos mejores opciones, entre las que los ciudadanos (y los campesinos que no recibieron los 38 mil pesos) elegirán.
 

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