La Jornada: Astillero
Pleito de capos
Farsa justiciera
Exacerbar ánimos
Nueva treta sucia
Julio Hernández López
MEGAOPERATIVO EN LA CAPITAL. Un agente de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina revisa las pertenencias de pasajeros de un pesero, como parte del dispositivo de seguridad acordado por la Conago, en busca de delincuentes. Imagen captada este lunes sobre el Eje 3 OrienteFoto Alfredo Domínguez
MEGAOPERATIVO EN LA CAPITAL. Un agente de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina revisa las pertenencias de pasajeros de un pesero, como parte del dispositivo de seguridad acordado por la Conago, en busca de delincuentes. Imagen captada este lunes sobre el Eje 3 OrienteFoto Alfredo Domínguez
Felipe Calderón está demostrando sin sombra de duda que está dispuesto a hacer lo que sea necesario para no entregar el poder (o, cuando menos, no cederlo a otro partido y, en el mejor de sus escenarios, dejarlo en manos de algún personaje débil y manipulable, algún cordero de sacrificio).
Por lo pronto, sostiene una guerra abierta contra el PRI, restregándole en el rostro de dinosaurio presuntamente sometido a cirugía estética las mil culpas innegables que le corresponden en la desgracia nacional, pero comprometiendo en esos lances la de por sí muy demeritada investidura institucional que tomó en 2006 y que hoy está convirtiendo sin reparos en ropa de combate electoral, dando por fenecido el lapso de ciertas aspiraciones de gobernabilidad, quemando puentes partidistas y hundiendo sus naves pinoleras en el mar de los comicios venideros, cancelada ya su etapa de presunto presidente de un país, para asumirse y declararse presidente del comité nacional panista en (otra) guerra..............sigue
No hay comentarios:
Publicar un comentario