Assange en La Habana
Foto: Beatriz Palo
A Fidel Castro podrá regateársele muchas cosas, pero no esa mezcla precisa e irrepetible de realismo y espíritu visionario que le permitió encabezar una revolución socialista y soberanista a tres olas de distancia de Estados Unidos, mantenerse al mando durante más de 40 años, incluso con el viento internacional radicalmente en contra, y soltar el poder y retirarse a una vejez apacible. Por eso me resultó impactante la importancia que Castro atribuyó, a mediados de 2010, al surgimiento de Wikileaks en la escena política mundial. Es cierto que la organización de las filtraciones ya llevaba, para entonces, mucho camino andado, pero no cobró celebridad sino con la revelación de los documentos secretos del Pentágono sobre las guerras de Irak y Afganistán. “Internet ha puesto en manos de nosotros la posibilidad de comunicarnos con el mundo. Con nada de esto contábamos antes (…) Estamos ante el arma más poderosa que haya existido, que es la comunicación”. O bien: gracias a Wikileaks no harán falta las revoluciones; de hecho, a esa organización habría que hacerle una estatua.....sigue http://navegaciones.blogspot.mx/2013/10/assange-en-la-habana.html?utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed:+Navegaciones+%28~+Navegaciones+~%29
No hay comentarios:
Publicar un comentario