Valdemar Moratto: Yo admiro a Andrés Manuel.

  Yo admiro a Andrés Manuel.

Me causa un sentimiento agradable ver a alguien luchar por la justicia para su gente, para su país, no me sorprende la cantidad de personas que también lo admiran y lo siguen, veo estudiantes jóvenes abiertos de la mente, veo a empresarios exitosos con intereses materiales pero con altos valores humanos que con un gran sentido de solidaridad se han sumado a la causa, veo poetas, escritores, medios, profesionistas, actores, actrices, cantantes; algunos no lo dicen pero lo sienten y nos acompañan.

Andrés se levanta muy temprano, se esfuerza, piensa, valora, sigue, llega a Tijuana con la camisa ajada por el viaje, con el pantalón sin raya y unos zapatos tipo “flexi”, le observo el rostro, cansado pero satisfecho por el apoyo solidario en la razón de todos, alegre de sentirse acompañado en esta epopeya que, él, el solito ha emprendido, no hay vuelta atrás, la gente lo rodea, lo mira con respeto, en cuchicheos se habla de su esfuerzo, le dice a Martí Batres “ayúdame ve a Pachuca mañana a intentar de nuevo el quórum legal que nos exige el IFE”, mientras yo voy a Tabasco y Chiapas, gran logística personal, empatar tiempos, vuelo, autobús, comer rápido, comunicando, abriendo, caminando; en casa esperan Jesús Ernesto y la compañera y amor de su vida; la señora Betty Gutiérrez Müller .

Hay un nuevo soplo de vientos que esparcen las buenas nuevas en toda la nación, se palpa la esperanza; los odios no nos invaden, las mentiras no nos arredran, nos unen, nos hacen grandes, como a "Don Quijote" las bestias se retuercen y se apartan a nuestro paso, el punzante dolor que sienten con esa piedra en el zapato les lastima fuerte, el dolor traspasado de nuestros muertos, de nuestros “Patishtanes” inocentes en la cárcel, de nuestros maestros golpeados, de nuestros jóvenes vilipendiados.

Nuestras playas con el aire fresco natural en espera de las cercas; para evitarnos el paso por ellas, los deportados en fronteras en espera de:… ¿De que.....? los policías están hartos, tambien los militares. 

La gente de buena fe está esperanzada y acude al encuentro de Andrés, si se pudiera pagar se pagaría por entrar a compartir eso tan bello que se siente cuando se "prende" la asamblea con un sentimiento grande de patria, de miradas cómplices para el combate contra la maldad de la mentira, el abuso y el cinismo del poder “no otorgado” por los ciudadanos; un gobierno que odia al pueblo no se puede sostener sin él; porque tenemos la verdad en la boca y la razón en la lengua…

Valdemar Moratto.
@valdemarucho
Tijuana, B.C. México, 15 de Octubre, 2013.